lunes, 18 de febrero de 2013

Suegra

En mi caso el sexo con maduras y los relatos que la gente escribe sobre ellos me han puesto siempre muy cachondo.
Mi suegra es bajita, algo rellenita y de poco pecho, mi relación con ella siempre ha sido bastante buena y no me puedo quejar. Pero tanto leer sobre el tema al final uno empieza a imaginar cosas con ella.
Cuando era novio de mi esposa la iba a ver a la hora del café, aunque por motivos de estudio mi pareja no estaba en casa, pero así la hacía compañía, me trague alguna que otra telenovela así de esa manera. Ella siempre ha solido vestir con batas de ir por casa, tirando a amplias con lo que dependiendo del angulo en que yo miraba podía ver algo su escote, que no era mucha cosa, pero mi imaginación hacia el resto. Con la confianza yo entraba y salia de esa casa sin problema, lo que me llevo un día a pillarla en ropa interior, nada sexy la típica braga faja y un sujetador de los de color carne, como buen imbécil aparte la mirada por decoro a ella.
Una de las cosas que a mi suegra le ponían y ponen muy nerviosa son las cosquillas y yo disfrutaba haciéndoselas por la espalda a la altura de la cintura y alguna vez me acerque con disimulo a la base del pecho, con ese saltito que solía dar pues era fácil un leve tocamiento, inocente pero que me ponía como una moto. Al final me prohibió que le hiciera cosquillas.
Un día que nos habíamos quedado solos mi novia y yo, nos pusimos calentitos y acabamos follando sobre su escritorio, ella apoyada sobre la mesa y yo follándomela desde atrás, le encanta esa pose pero ahora me cuesta darle un buen ritmo. Estábamos follando tan a gusto que cuando escuchamos que mi suegra estaba hablando en la calle con la vecina, nos acelero el morbo de que nos pillará en la faena, incluso a mi novia la idea le pareció gustar. Nos corrimos a gusto pero no nos pillaron.
Años después un día en la cama con mi esposa, salio un comentario, de que mi suegra le había explicado lo bien que se lo había pasado con mi suegro, mientras él estaba con la pierna rota y ella había descubierto el placer de follar montada sobre él. Cosas así son las que me hacen pensar que le faltan muchas experiencias.
Digamos que pocas mas cosas pasaron entre mi suegra y yo pero ya casados y yo con mi buena cornamenta, vino un día a casa. Mi esposa no estaba y yo le invite a tomar café.  Era verano y caluroso, ella vestía blusa blanca y sujetador blanco y llevaba desabrochado el botón clave para que se viera el sujetador, se lo comente que se lo cerrara que la tentación era mucha, así como medio en broma, insinuando que se lo cerraría yo mientras me acercaba con las manos. Me pego un cachete en la mano, se levantó y dejo las cosas en el fregadero para irse. La abordé por que me había excitado la situación y la acorrale hacía la ventana pidiéndole un beso. Su respuestas fueron: "Aparte o grito" y "Tú ya tienes una mujer que te satisfaga". El hecho de que mis padres que viven en el piso de abajo escucharan algo me acobardo y la deje salir, Se fue rápida y yo me quede tremendamente empalmado y pensando que debería de haberla enseñado alguna foto de su hija y que supiera lo puta que es y lo poco que me cuidaba mi esposa. Hasta pensé en chantajearla pero la cordura gano enteros. Ya no ha venido mas a casa sin asegurarse que estaría mi esposa.
Yo en cambio si que me he hecho algún pajote pensando en ella, y como un día le presto unas bragas a mi esposa, por que se las había ensuciado con una regla, me queda el consuelo de pajearme con esas bragas, nada sexy para variar.


miércoles, 13 de febrero de 2013

Fiesta fantasias cuckold

Nosotros no podremos ir, pero teneis mas información sobre esta fiesta que promete ser muy especial aquí.